Dicen que tengo un fetish con los pies, yo digo que no es cierto. Más que «fetish» es admiración por esa parte corporal que te permite pisar tu propia tumba pública.
Dicen que tengo un fetish con los pies, yo digo que no es cierto. Más que «fetish» es admiración por esa parte corporal que te permite pisar tu propia tumba pública.